La madera del bálsamo es bastante fuerte y durable, por ser un árbol de bosques húmedos y muy húmedos tropicales, su madera es muy resistente a las inclemencias del clima. Tiene una larga duración al intemperie y en contacto con el suelo. Un aspecto muy positivo en cuanto al secado del bálsamo, es que se seca rápidamente al aire libre sin presentar deformaciones ni agrietarse.
Al ser una madera muy dura, es difícil de trabajar, por lo que se requiere utilizar herramientas con filos reforzados y usar cortes adecuados. Por esta misma razón, es que el bálsamo tampoco de se deja inmunizar bajo ninguna técnica.